La mamografía digital reduce el número de falsos positivos que se obtienen con la mamografía convencional, según los resultados de un estudio dirigido por el Hospital del Mar de Barcelona en el que se han analizado más de 240.000 pruebas realizadas entre 1996 y 2007 en Barcelona, Girona, Valencia y Cantabria.
La investigación, que publica la revista “Radiology”, reconoce que cuando hay un tumor ambas pruebas son igual de válidas para detectarlo, pero señala que la mamografía digital afina más el diagnóstico y reduce los casos en los que se informa de la posibilidad de un tumor sin que realmente exista.
El Hospital del Mar ha señalado en una nota que la mortalidad anual se ha reducido en Cataluña un 2% y el porcentaje de supervivencia a los 5 años es del 85% en la población general.
La investigación, dirigida por la Dra. María Sala, del Hospital del Mar, se ha desarrollado a partir del análisis de un total de 242.838 mamografías de cribado (171.191 por técnica analógica; 71.647 por método digital) de cuatro programas de detección precoz de cáncer de mama de Barcelona, Gerona, Valencia y Cantabria. En el examen, realizado entre 1996 y 2007, han participado un total de 103.613 mujeres de entre 45 y 69 años “En total, se han diagnosticado 1.080 cánceres sin diferencias significativas entre mamografía analógica y digital, pero hemos observado que el porcentaje de pruebas innecesarias ha sido inferior con la MD” señala la investigadora María Sala. Estas conclusiones derivan de un proyecto mucho más amplio y multicéntrico, coordinado desde el Hospital del Mar por el Dr. Xavier Castells, Jefe del Servicio de Epidemiologia, donde participan los Programas de detección precoz más consolidados del país.
Una elevada proporción de tumores se diagnostican a partir de las mamografías de cribado que se realizan cada dos años a las mujeres que participan en los programas de detección precoz. En este sentido, la mamografía digital ha demostrado disminuir pruebas innecesarias como biopsias o ecografías en mujeres que no tienen cáncer. Ahora bien, ¿qué pasa cuando el cáncer aparece entre este intervalo de tiempo, es decir, entre una mamografía y otra? “En algunos casos, cuando la mujer se hace la mamografía no hay presencia de tumor; pero antes de hacer la siguiente mamografía, ya existe”, ha explicado la investigadora la Dra. María Sala. Estos tipos de tumores se conocen como “verdaderos cánceres de intervalo”, tumores de mama de crecimiento rápido, que en una elevada proporción presentan un patrón molecular asociado a un peor pronóstico -llamado cáncer triple negativo-y más frecuentes en mujeres con elevada densidad mamaria, según muestra un estudio reciente de este mismo equipo del Hospital del Mar, en colaboración con el Servicio de Oncología y Anatomía patológica. Las características de estos tumores los hace menos susceptibles de ser detectados en las pruebas de cribado. Por este motivo “es necesario profundizar en el estudio de los determinantes que condicionan la aparición de estos tipos de cáncer -señala la Dra. Sala- para, en un futuro mejorar la eficacia del proceso de cribaje, a partir de la revisión de los intervalos entre mamografías, en función de los patrones de riesgo de las mujeres o haciendo uso de diferentes tecnologías (como las resonancias magnéticas) para grupos específicos de mujeres”.
fuente: univadis
No hay comentarios:
Publicar un comentario